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8 oct 2013

Cómo pintar con burbujas de la manera más divertida


Hoy proponemos diferentes maneras de pintar con burbujas, cada cual más divertida. No nos importa el resultado porque lo que buscamos es el PROCESO: descubrir diferentes formas de pintar, tener diversas experiencias sensoriales y sobre todo, pasarlo muy bien. Recomiendo hacer estas técnicas de pintura en exterior si se puede porque ¡manchan!


1- Poner la hoja de papel sobre las burbujas hasta que estas hayan estallado. 

Preparamos la mezcla de pintura en varios recipientes. La mezcla de pintura se hace con igual medida de detergente de lavavajillas y témpera líquida, y después se añade un poco de agua.

Le damos a D. la pajita y le decimos que sople (supervisar a los niños pequeños para que no aspiren).


Ahora tenemos que poner el papel sobre las burbujas y esperar a que hayan estallado. 
Esta parte tiene que hacerla un adulto o un niño mayor de 6 años.


2- Colorear tu pompero habitual y lanzar las burbujas al papel.
 
Preparamos el papel, preferiblemente en el exterior.


Ponemos pintura líquida junto con la mezcla de pompas en el pompero y ¡a lanzar pompas!


Es un poco difícil hacerlas llegar al papel, a no ser que estés muy cerca. ¡Esta sí llega!


Pero lo más divertido para D. es ¡explotarlas!


Si quieres hacerlo dentro de casa, puedes colocar el papel en una caja para que no manche. Asegúrate de que las burbujas caen dentro de la caja. En lasmanualidades.com lo hacen así.

3- Dejar caer o lanzar cientos de burbujas.
(Esta es casi casi la más divertida).

Preparamos el papel y la mezcla de pintura igual que en la técnica de pintura con burbujas 1.


Le damos a D. la pajita y le decimos que sople (supervisar todo el rato para que no aspire). 
Podemos dejar caer la espuma de burbujas directamente al papel.


También podemos coger la espuma y lanzarla al papel. ¡Esto parece más divertido aún!



Sin darnos cuenta nos ha salido la cabeza del elefante Babar. ¿Lo veis?


4- Pintar con espuma en las paredes de la bañera. 
La más divertida de todas después de haberse puesto muy sucio pintando.


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Edad: Desde 3 años (con supervisión de un adulto).

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